botellas de plástico vacías

Ekocycle Cube une ecología y nuevas tecnologías

Ekocycle Cube es una impresora 3D que revoluciona el reciclaje de las botellas de PET creando con ellas diferentes objetos 3D

La revolución de las máquinas 3D avanza en terrenos cada vez más inesperados y dinámicos. Las máquinas, que ya son capaces de imprimir objetos de diseño, piezas de máquina y autoclonarse, son también capaces de imprimir comida y casas.

Suena muy futurista, ¿Verdad? Pues ya es real; el mes pasado se conoció que en Shangai, China, una empresa constructora fabricó 10 casas con una impresora 3D en menos de 24 horas y en el 2016 la empresa pionera Natural Machines, sacará una edición que será capaz de imprimir planos completos.

El siguiente paso que dan estas revolucionarias máquinas es el que surge gracias a la idea de Ekocycle Cube 3D, un proyecto de impresora que usaría plástico reciclado como material para fabricar otros objetos. De esta manera  se construiría y se reciclaría al mismo tiempo. ¿No es una idea genial?

“La basura es basura solo si nosotros la desaprovechamos. Las cosas no tienen que finalizar, sino que pueden volver a comenzar” sostiene el Chief Creative Officer de 3D Systems, que a su vez es el director que comenzó a llevar a cabo este proyecto que aún está en desarrollo. 

Botellas de plástico azul
Convierte basura plástica en objetos prácticos y originales | Getty Images

Ekocycle Cube utiliza cartuchos o rollos cuyo material contiene un 25% de politereftalato de etileno (PET), la sustancia con la que se hacen las botellas, para imprimir los objetos que deseen. En cada uno de estos rollos se reciclan hasta tres botellas.

No es difícil pensar que en un futuro sea posible que esta misma máquina devore toda la basura plástica domiciliaria para convertirla en objetos prácticos y originales

“Cada cartucho de Ekocycle convierte un equivalente de tres botellas en tu próxima prenda, en un accesorio musical o en un objeto de decoración. Con un simple toque puedes decidir cómo, dónde y cuándo lo hace”, promete la publicidad de la nueva impresora que, según los fabricantes, llegaría al mercado en una fecha tan próxima como finales de 2014 por unos 1.200 dólares.

Este caso nos hace darnos cuenta de lo rápido que avanza la tecnología, permitiéndonos hacer cosas que antes nos parecían imposibles.